Este sábado nos reunimos en casa de Cristina Pacheco. Las fotos de la cámara de Juancarlo están aquí (click), y la crónica de Mireya es ésta:
Definitivamente fue una reunión de chamos. Se juntaron casi una docena, jugaron wii y papelito y finalmente se intercambiaron direcciones de messenger, facebook, etc, etc. Cuando nos íbamos, Marina (la mayor de Cristina) dijo decidida NO SE VAYAN. Y el hijo menor de Ricardo (Eduardo) sostuvo firmemente que la cosa tenía que repetirse otro día. Así que definitivamente, se divirtieron.
Nosotros, aunque éramos poquitos, también nos reimos bastante. Sólo imagínense a Juancarlo contándonos todos los detalles de un libro que está leyendo sobre la relación entre el sexo y la matemática (todos -en público o en secreto-calculamos si habíamos tenido o no una docena de parejas sexuales antes de encontrar al príncipe o a la princesa y como que la cosa más o menos cuadra ¿no?), o a Ricardo -el esposo de Cristina- dándonos descriptivas pinceladas de la relación entre el goce y lo que nos podría ocurrir con la menopausia (menos mal que aún faltan años), aunque Marta (creo que fue Marta) aclaró que ellos no quedan lisos, que también les sale andropausia. Pero no todo fue sexo. Se habló de la soledad, de la compañía, de la pareja (estábamos intensos). Los estados de ánimo fueron varios. Nos preocupamos porque Eduardo Villasmil había sufrido una caída y estaba en la clínica y por eso no había asistido. Nos enternecimos con la historia de amor de Ricardo y Cristina. Nos asombramos con las anécdotas bellísimas de las hijas de Natalia. Y Cora y yo hasta tuvimos tiempo de hablar de nuestras tareas de madres y representantes del mismo colegio. En fin, siempre es rico vernos y acompañarnos en las buenas y en las malas y saber que nuestras vidas siguen corriendo (y eso lo vemos claro en nuestros hijos, que empezaron siendo niños en nuestras primeras reuniones y ahora son una pandilla de adolescentes y jóvenes). Pero en el fondo, fondo, fondo, nosotros no envejecemos, somos los mismos chamos de bachillerato ¿o no?
sábado, 23 de febrero de 2008
sábado, 9 de febrero de 2008
Reencuentro en casa de Susan
Este sábado nos reunimos en casa de los padres de Susan para no dejar pasar la oportunidad de compartir con Susan y Natalia, expatriadas quienes nos visitan por un corto tiempo.
Disfrutamos de incontables botellas de vino, un riquísimo pasticcio de berenjentas, y de mucha conversa, y nos reimos a montones con Jesús Blanco contando las confidencias de todo el mundo en tiempos del colegio.
Estuvimos Susan Anderson y sus padres, Idana Rodriguez, Ronnie Eidelman y su esposa, Natalia Scannone, Marta Morales, Carlos Brandt, Jesús Blanco, Cristina Pacheco y su esposo, Esperanza Chacón, y Juancarlo Añez y su esposa Cora.
Las fotos que tomó Juancarlo están aquí.
Disfrutamos de incontables botellas de vino, un riquísimo pasticcio de berenjentas, y de mucha conversa, y nos reimos a montones con Jesús Blanco contando las confidencias de todo el mundo en tiempos del colegio.
Estuvimos Susan Anderson y sus padres, Idana Rodriguez, Ronnie Eidelman y su esposa, Natalia Scannone, Marta Morales, Carlos Brandt, Jesús Blanco, Cristina Pacheco y su esposo, Esperanza Chacón, y Juancarlo Añez y su esposa Cora.
Las fotos que tomó Juancarlo están aquí.
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